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Calaveritas de Azucar

Calaveritas de Azucar 1

Calaveritas de Azucar

Una calavera de dulce es una golosina muy utilizada para las celebraciones del día de Muertos en México.

La golosina está hecha de azúcar de caña, casi siempre de una pieza y sin colorante (excepto que a veces le añaden un poco de vainilla), y adornadas con líneas en zigzag de otro dulce con tinte vegetal, comúnmente de verde, azul, amarillo o rojo. Lleva además papeles de brillo metálico en los citados colores, y en la frente suele llevar, escrito con el segundo dulce citado, el nombre de una persona estimada, generalmente viva. Algunas personas guardan este dulce unos días y luego lo tiran, otros lo comen.

Actualmente, también suelen hacerse este tipo de golosinas utilizando chocolate o semillas de amaranto y frutas secas en lugar de los ingredientes antes mencionados.

Ingredientes:


3/4 de kilo de azúcar blanca
Media cucharadita de crémor tártaro
1/4 de litro de agua
Moldes para mezclar los ingredientes

Para adornar:


2 claras de huevo
azúcar glass
colores vegetales
papel estaño de varios colores
papel encerado para hacer duyas o cucuruchos para adornar
moldes para hacer las calaveras

Preparación:


Coloque en un traste el agua y el azúcar y mueva hasta que el azúcar se disuelva. Deje hervir de 12 a 15 minutos. Retire del fuego y bata hasta que cambie de color a blanco.
Una los moldes de calavera con ligas y rellénelos por el orificio con la mezcla ya preparada.
Espere a que los moldes estén tibios y el azúcar de dentro haya cuajado. Sumerja los moldes en agua fría y sáquelos enseguida. Quite las ligas y retire los moldes. 
Ponga las calaveras a escurrir y secar sobre una charola.

Para el decorado, se hacen las duyas con el papel encerado, como conos con la punta ligeramente abierta.
Se baten las dos claras de huevo, se les agrega el azúcar glass y unas gotas de limón hasta formar una pasta suave y uniforme.
Esta mezcla se vierte en varios moldes pequeños. Para darles color se les agrega unas gotas de colorante vegetal del color que se desee. 
Llene una duya con cada color y adorne cada calavera con esta mezcla. También utilice pequeños recortes de papel estaño. Añada el nombre, en la frente de la calavera, de la persona a quien vaya a regalarla.